Disparás pesado con los ojos
abiertos de par en par para
que un colibrí cante lo que
nadie sospechaba contento
dejando un techo abierto
del corazón que ya no bombea
de solo murmurarte un nombre
en raro ritmo nuevo
toda sonoridad y marcha
cantando la fiesta de sentir
No hay comentarios:
Publicar un comentario