miércoles, 30 de marzo de 2011

Curas

Si son las cicatrices señales
de un semáforo rojo que sueña
y silban la marca del dolor
no es para taparlas con curitas
inservibles e insensibles al pasado

si son las caricias curativas
de lo que no se puede evitar
y abren las puertas a futuro
no es para quejarse del lento venir

también puede gozar quien tiene
adheridas al cuerpo miles de heridas


viernes, 25 de marzo de 2011

Mundos que no


Salteando los espacios
en blanco pero no tan vacíos
como para pasar holgadamente
avanzaba un viejo caballero
que acababa de nacer

sin compañero ni caballo
ni nueva amada de reciente
invención creaba mundos
a cada paso   pausadamente

no los decía por temor
a un aire manchado que
los contamine y mate
tanto mundo y tanto color



miércoles, 16 de marzo de 2011

Cambio de color


Pensaba en tus cambios de color
     del viejo verde a nuevo
     al nuevo sepia sin usar
mientras teñiste los días de paciencia
aunque estaba lleno de relojes

tuviste la virtud de hacernos
creer tus variaciones como verdad
cuando eran capricho nada más

tal vez mute todo y no lo note
pero cuánto mejor se siente
   cuánto más se ve desde
     la miopía que entiende al mundo
        desde la cara más interior



sábado, 12 de marzo de 2011

Costumbres


Es de esquirlas ya el canto
que nos entra de a poquito
en el medio de un pecho
que ya no era blanco
sino estela de una luz
en plena marcha de lento paso

¿cuánto tiempo sin esperar tu canto?

nadie espera nunca esa voz
que nos ametralla de colores



lunes, 7 de marzo de 2011

Climas


Fue en octubre que vencieron
nuestros cheques de dolor
y no hubo prórroga ni aplazo
ni quien tendiera una mano
para mantener la vertical

hoy los marzos son de calma
pero se avecina una tormenta
de amor y rayos de colores
con vientos de cosquillas y rubor

ofrecida está esta mano      toda sol




jueves, 3 de marzo de 2011

Color esperanto


Esperar los pasos del silencio
es exiliar la esperanza
a manos de un espanto
que no te esquiva ni jodiendo

atacar la soledad a gritos
es bombear el corazón a mano
dándole colores
a lo que hubiera acabado
agarrando de los pelos a quien pase
para hacerle saber que quedamos
aunque ella se fue otra vez